La Verdadera «Diabetes Controlada«: Más Allá de la Medicación
En el mundo de la salud, pocas condiciones han generado tanto debate y confusión como la diabetes. Muchas personas creen que su diabetes está «controlada» porque siguen al pie de la letra las indicaciones médicas: se inyectan insulina, toman metformina, medicamentos para la neuropatía, pastillas para dormir y otros fármacos para contrarrestar los efectos secundarios de la enfermedad. Sin embargo, ¿es esto realmente un control de la diabetes? La respuesta es no. Lo que muchos llaman «diabetes controlada» es, en realidad, una diabetes medicada. Y hay una gran diferencia entre ambas.
Diabetes Medicada vs. Diabetes Controlada
La diabetes medicada implica depender de fármacos para mantener los niveles de glucosa dentro de rangos aceptables. Sin embargo, esto no significa que la enfermedad esté bajo control. La medicación puede ayudar a manejar los síntomas, pero no aborda la raíz del problema: el desorden metabólico que impide al cuerpo procesar adecuadamente los carbohidratos refinados, almidones y azúcares.
Por otro lado, una diabetes controlada es aquella en la que la persona ha logrado estabilizar sus niveles de glucosa principalmente a través de cambios en su estilo de vida, especialmente en su dieta. Esto no solo reduce la dependencia de medicamentos, sino que también previene las complicaciones asociadas con la diabetes, como la neuropatía, la pérdida de visión, las enfermedades cardíacas y las amputaciones.


Fuente: Metabolismo tv
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Fuente: Metabolismo tv
El Problema de la Diabetes Medicada
La diabetes es una mina de oro para la industria farmacéutica. Los diabéticos son los mayores consumidores de medicamentos: insulina, metformina, fármacos para la presión arterial, antidepresivos, medicamentos para el colesterol y muchos más. Esto se debe a que la diabetes no solo afecta los niveles de glucosa, sino que también daña órganos y sistemas vitales, lo que lleva a una cascada de problemas de salud.
Un estudio realizado en 2008, conocido como el Estudio ACCORD, reveló algo alarmante: el control intensivo de la glucosa mediante medicamentos aumentaba la mortalidad en los pacientes diabéticos. El estudio tuvo que ser cancelado antes de tiempo porque los pacientes que recibían más medicación tenían un 35% más de probabilidades de morir por causas cardiovasculares y un 22% más de riesgo de muerte por otras causas. Esto demuestra que la medicación excesiva no es la solución, sino parte del problema.
Cómo la Diabetes Daña el Cuerpo
Cuando los niveles de glucosa superan los 130 mg/dL en ayunas, se desencadenan dos fenómenos destructivos en el cuerpo:
Ácido Láctico: El exceso de glucosa en la sangre se fermenta, produciendo ácido láctico. Este ácido es corrosivo y daña las células, especialmente en las partes inferiores del cuerpo, lo que explica por qué los diabéticos suelen sufrir amputaciones en piernas y pies.
Glicación: El exceso de glucosa hace que las células se peguen entre sí, impidiendo su correcto funcionamiento. Este proceso daña órganos como los riñones, los ojos y el corazón, y está relacionado con complicaciones como la ceguera, la insuficiencia renal y las enfermedades cardíacas.


La Solución: Controlar la Diabetes de Manera Natural
La verdadera diabetes controlada no depende de medicamentos, sino de un enfoque integral que incluye dieta, hidratación y desintoxicación. Aquí te presentamos los pasos clave para lograrlo:
Desintoxicación de Carbohidratos Refinados: Los carbohidratos refinados (pan, pasta, arroz, dulces) son los principales responsables de los picos de glucosa. Eliminarlos de la dieta es el primer paso para controlar la diabetes.
Dieta 3 por 1: Este enfoque consiste en llenar tres cuartas partes del plato con alimentos amigos (proteínas, grasas saludables y vegetales) y solo una cuarta parte con alimentos enemigos (carbohidratos refinados). Esto permite disfrutar de una alimentación variada sin comprometer el control de la glucosa.
Hidratación Adecuada: La deshidratación aumenta la resistencia a la insulina. Beber suficiente agua es esencial para mantener los niveles de glucosa estables.
Magnesio: Este mineral es crucial para la producción de insulina y la sensibilidad de las células a esta hormona. Sin magnesio, es imposible controlar la diabetes de manera efectiva.
Limpieza de Hongos Cándida: Los diabéticos suelen tener altos niveles de hongos en el cuerpo debido al exceso de glucosa. Limpiar el organismo de estos hongos es fundamental para recuperar la salud.
La Importancia de la Preparación de los Alimentos
Además de elegir los alimentos adecuados, es fundamental prestar atención a cómo los preparamos. La contaminación con metales pesados como el aluminio, cromo, níquel y sustancias como el PFOA (presente en el teflón) puede afectar negativamente nuestra salud, especialmente en personas con diabetes. Estos metales y químicos no solo contaminan los alimentos, sino que también pueden interferir con la absorción de nutrientes esenciales como proteínas, vitaminas y minerales.
Para evitar esta contaminación, es recomendable cocinar los alimentos en utensilios de acero quirúrgico 316L. Este material es seguro, no libera toxinas y protege la integridad de los nutrientes, asegurando que los alimentos conserven sus propiedades beneficiosas. Cocinar en acero quirúrgico 316L es una forma efectiva de eliminar la contaminación y garantizar que lo que consumimos sea lo más saludable posible.


¿Se Puede Revertir la Diabetes?
Aunque la diabetes no se «cura» en el sentido tradicional, es posible revertir sus efectos y vivir una vida normal sin depender de medicamentos. Miles de personas han logrado reducir o eliminar su dependencia de la insulina y la metformina al adoptar un estilo de vida saludable. Esto no significa que la diabetes haya desaparecido, sino que está tan bien controlada que la persona puede vivir sin limitaciones.
Conclusión
La verdadera diabetes controlada no se logra con pastillas e inyecciones, sino con un cambio profundo en la forma en que nos alimentamos y cuidamos nuestro cuerpo. La medicación puede ser útil en ciertos casos, pero no es la solución definitiva. La clave está en entender que la diabetes es un problema metabólico que se puede manejar con una dieta adecuada, hidratación, desintoxicación y un estilo de vida saludable.
Además, es esencial prestar atención a cómo preparamos nuestros alimentos. Utilizar utensilios de cocina seguros, como los de acero quirúrgico 316L, nos ayuda a eliminar la contaminación con metales pesados y químicos dañinos, protegiendo las proteínas, vitaminas y minerales que son vitales para nuestra salud.
Si tienes diabetes o conoces a alguien que la padece, recuerda: la diabetes no te controla a ti, tú controlas la diabetes. Toma las riendas de tu salud, elige alimentos adecuados, cocínalos de manera segura y descubre que es posible vivir una vida plena y libre de complicaciones.